
Introducción al juego
Una partida de ajedrez se disputa entre dos jugadores; cada uno posee dieciséis piezas, siendo las de un jugador de color claro, llamadas blancas, y las de su oponente de color oscuro, llamadas negras. Las piezas se mueven sobre un tablero de ajedrez cuadrado de 8×8 = 64 escaques o casillas también cuadradas, alternando colores claro y oscuro (32 y 32). Las piezas de cada jugador al principio de la partida son:
Piezas
Blancas Negras Descripción
Un rey
Una dama, también conocida como reina[19]
Dos alfiles
Dos caballos
Dos torres, también conocidas como roques[20]
Ocho peones
Cada tipo de pieza se mueve de una forma diferente, lo que determinará su potencia y su importancia en el desarrollo del juego.