PotoSucio

Son pocos los lugares donde se discuten los asuntos importantes de la vida. Hoy en día todo se trata del sistema que rige la sociedad. Se olvidan que las jerarquías de las temáticas están sujetas al punto de vista. No sólo quieren imponer sus posturas, sino que también los juegos.

 
¿Alfil o caballo? ¿Cómo debe ser la trinchera de peones? ¿Cerrada o abierta? ¿Caballo o alfil? ¿Todo se trata de simplificación? ¿Cómo matar el alfil bueno? ¿Cómo transformo al malo en bueno? ¿El caballo sólo se impone en partidas de bloqueo?¿Cuándo sacar el rey a jugar?

Una sala con doce tableros y relojes a gusto. Piezas rotas de tantas guerras: reyes sin cruces, torres descrestadas, coronas picadas de reinas, caballos sin cabeza. Un espacio que se aísla del tiempo, pero vive en su contexto. Un templo de ajedrez en la principal Escuela de Injeniería del país.

¿e4 v d4? ¿Él que no juega peón rey es un cobarde? ¿Italiana o Española? ¿Cómo dejas pastando el caballo del rival? ¿Cuántos peones vale un rey en el medio en un final? ¿Memoria o creatividad? ¿Estudio o talento? ¿El caballo está ahí para que la partida no crezca torcida? ¿Fischer dio el golpe más duro de la guerra fría?  
Un tarro abierto que analiza las partidas. Copas amontonadas que hablan del esfuerzo y neuronas recalentadas. Copas que no existen que hablan de las penurias y los tropiezos. Da igual, el tiempo se encarga de oxidarlo todo. Como esta agónica sala de ajedrez llamada Chacra, que mañana va a ser transformada en oficinas.